Salmo 82 (81)

¿Hasta cuándo daréis
sentencia injusta?
Salmo de súplica. Colectivo.
Contiene enseñanzas.

Tema


Los profetas eran directos al acusar las injusticias de las autoridades y jueces perversos de Israel. (Am 6, 12; 8, 4-8; Is 1, 23; 3,13-15). En esta situación de los profetas hay que interpretar este salmo. A los que tienen esta responsabilidad del pueblo, Dios les dirige su palabra pidiéndoles rectitud. Finalmente (8), el pueblo clama a Dios, para que rija a todo el mundo con justicia.
1: Dios se manifiesta en su sede de juez.
2-4: Dios acusa las injusticias de los malos jueces, pidiéndoles rectitud.
5: Reflexión del salmista: Las autoridades y jueces no tienen sabiduría. Para juzgar con rectitud a los necesitados es necesario conocer los proyectos profundos de Dios.
6-7: De nuevo habla Dios. Los jueces, puesto que son representantes de Dios, tienen un nombre grande, pero también ellos perecerán bajo la muerte.
8: El pueblo pide el juicio final de Dios. Que juzgue al mundo entero con rectitud.

Salmo


1 Dios se levanta en la asamblea divina,
   rodeado de ángeles juzga:

2 «¿Hasta cuando daréis sentencia injusta
   poniéndoos de parte del culpable?

3 Proteged al desvalido y al huérfano,
   haced justicia al humilde y al necesitado,

4 defended al pobre y al indigente,
   sacándolos de las manos del culpable».

5 Ellos, ignorantes e insensatos, caminan a oscuras,
   mientras vacilan los cimientos del orbe.

6 Yo declaro: «Aunque seáis dioses
   e hijos del Altísimo todos,

7 moriréis como cualquier hombre,
   caeréis, príncipes como uno de tantos».

8 Levántate, oh Dios, y juzga la tierra,
   porque tú eres el dueño de todos los pueblos.

Palabras clave


- Dios Juez: Se levanta en la asamblea (1), juzga (1), levántate oh Dios (8), juzga la tierra (8),
- Los Jueces de Israel: Sentencia injusta (2), poniéndoos de parte del culpable (2), haced justicia (3), proteged al desvalido (3), defended al pobre y al indigente (4), sacándolos de las manos del culpable (4),
- Indigentes: Proteged al desvalido (3), pobre (4), huérfano (3), humilde (3), necesitado (3).

La luz del Nuevo Testamento:


“Pilatos salió otra vez fuera y les dijo: Mirad, os lo saco fuera para que lo sepáis que no encuentro ningún cargo para él... No tendrías ninguna autoridad sobre mí si Dios no te la diese... Entonces, al fin, se lo entregó para que lo crucificasen” (Jn 19, 4. 11. 16).
“No juzguéis nada antes de tiempo, esperad a que llegue el Señor” (1 Cor 4, 5).
“Padre nuestro, venga a nosotros tu reino” (Mt 6, 5, 10).

Oración


Señor Jesús,
las injusticias de los jefes
te condujeron a la muerte,
pero el Padre, resucitándote de entre los muertos,
te hizo la verdadera justicia.
Ilumina las mentes y los corazones
de nuestras autoridades y jueces.
Llénanos de tu amor,
y manifiesta entre nosotros la luz de tu reino,
la vida, la paz y la rectitud